Luna de Mayo

Vísperas

Sin principio y sin final. Todo es víspera en esta ciudad. De forma más distanciada durante gran parte del año pero arracimada en mes y medio con la llegada violenta de la primavera siempre atravesándola. Cualquier movimiento tiene su continuidad y cualquier causa su efecto. No se mueve una Imagen de un altar a otro por capricho, luego vendrá un quinario, un besapies, un Víacrucis y una subida al paso. No se prepararon soberaos para nada, ni se envolvieron con mimo las piezas de plata, ni bajaron las poleas para llenar los salones, ni se dejaron riñones para que brillaran los varales como el primer día. Cada sístole en el corazón del que aporta su granito de arena no es en balde, eso nunca, sirve para hacer más grande este fractal del que todos formamos parte. Le dirán que todo el año es Semana Santa, desengáñese, todo el año es víspera. Semana Santa son sólo siete días.

Primero de mis cuatro pequeños artículos publicados en el especial de Casco Antiguo para la edición de 2011