Quedan 36 días

En una esquina...
Sevilla, cuaresma, mediodía, sol, blogueros, amigos, pasión, buena bebida y mejor comida de por medio.
Si con mi padre aprendí la geometría de la movilidad semanasantera, con esta auténtica comunidad a pie de calle y sabiduría aprendo el por qué que ya nos invade esa luz que sólo puede verse durante unos minutos al día.

 ¡Ay que poquito queda!

Llevaré a mis niños de testigo.