¿Qué cabe en un palmo de calle?
¿Caben tus suspiros?
¿Caben los lamentos?
¿Cabe la espera insufrible del tiempo nublo y cansino?
¿Qué cabe en un palmo de calle?
Pero no hay eco porque no cabe ni el aire.
Tu mundo de cal y rejas pintadas esperan que el reflejo de los flashes te devuelva la esperanza de que todavía no es tarde. Ni siquiera es todavía.
Pero no hay estrechez que a ti te calme.
El día no se ha puesto el traje de primavera
ni hay sol de cofradías pero la noche...
La noche ya viste sus lunas de apreturas y espesa niebla temblante.
Incienso de pasocristo, incienso de caminante.
Piel con piel
Hace 1 año
3 comentarios:
¡Espectacular!
Hoy te has quedado a gusto, amigo.
¡Qué sería de nuestro espíritu sin ese olor a incienso! Y los acordes...
Un palmo de calle llena de sentimientos con aromas de incienso.
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