Quedan 25 días

Este año en Cuaresma hay un barrio que vivirá muchas cosas de forma especial. Ese arrabal en ocasiones tan sevillano que lo consideramos como parte del mismo centro de la ciudad. En viacrucis saldrá El Cachorro, el Cristo de la Expiración, el máximo exponente del barroco sevillano. No será necesario grande convocatorias ni mayores explicaciones. Incluso los no partidarios se darán cita. Es imposible no involucrarse en su mirada. Siempre devuelve un reflejo, un destello, un juego mágico lo envuelve. Buscar la mirada del Cristo trianero, que no olvidemos marca el final de una vida recogida en un instante, es algo más que asistir a una salida petitoria, especial, extraordinaria, fuera de calendario o como quieran llamarle. No lo olvidemos. Querrán estar allí cuando ocurra.