No se enseña, se aprende

Ya sabes de qué hablo, ¿no?

Podemos pensar que en nuestros comienzos en esto de entender y vivir las cofradías, la calle y sus leyes no escritas, las razones que llevan a entender porque al paso de una Imagen se le responde de alguna forma o con silencios, o por qué la misma hermandad cuando está en un viacrucis es eso, hermandad, y no cofradía en su día de salida. ¿Por qué no son garantía de éxito clasificaciones como capa y cola, cíngulo o esparto, blanco o negro, barrio o céntrica, música o sin ella? Porque esto va de aprender sobre el terreno, año tras año, visita tras visita, parón tras parón, padrenuestro, reventaera, torrija, o avemaría al terminar la estación.