Aquí estamos

Para muchos todo lo que había hasta llegar al día de ayer era la nada, otros tienen el mal gusto de emplear la expresión precuaresma (fatiguita hijo) desde incluso antes de bailar la primera sevillana en Los Remedios, porque uno de los problemas de nuestro tiempo es no saber guardar precisamente el tiempo que acarrea  las formas, las medidas...porque fuera del tiempo esperado y el de espera lo que nos queda por hacer es hablar, arrimar el hombro para que la hermandad sea una hermandad, procurar que la ciudad sea un lugar habitable y adaptado a lo que somos ahora, en  número, diversidad y forma.

No se si como cofrades hemos hecho los deberes, buena reflexión para pararse un rato porque hay sombras que no se alejan pero en lo que estaremos de acuerdo es en que los que tienen capacidad de llevar a cabo cambios que ayuden a todo esto, en el Consejo, en las Juntas de gobierno, son un no rotundo. Está vez, eso sí, lo han intentado pero no han estado en lo que deberían y han vuelto al ombliguismo. Da mucha pena. 

Pero como dice la pintada (muy cerca de una puerta de capilla famosa por ser lienzo de protestas y amenazas de consumo interno pero vociferadas hacia el exterior)... aquí estamos, tenemos la Cuaresma entrando por nuestra puerta, mi cuarentena, atrás el negro de la impaciencia, al fondo el rojo de nuestra pasión desmedida.

Grafiti con tres bandas (de izquierda a derecha, negro, amarillo y rojo). Sobre franja amarilla escrito en grafía andaluza: Aquí Estamos

 Grafiti localizado en calle José Gestoso.