#Quedan8
Estaba viendo una serie, High Maintenance, sobre un tipo que en bicicleta recorre NuevaYork vendiendo marihuana a domicilio. En cada capítulo salen multitud de personaje, historias, situaciones, vicisitudes de toda naturaleza que orbitan en torno al personaje principal y su clientela. Algún capítulo, incluso, ha tenido como protagonistas a vecinos de la gran manzana que tienen un encuentro casual o simplemente se han cruzado con el vendedor del que no se sabemos su nombre real (no la he terminado aún)...
Os decía que estaba viendo la serie cuando me di cuenta que estaba ante un paralelismo tremendo, el tipo de la bicicleta era la cuaresma y la Semana Santa es quien atraviesa la ciudad compartiendo su producto con nosotros, su ansiosa clientela. Entramos y salimos de las escenas, nos juntamos unos cuantos incluso cuando parece que se adormita la memoria pero seguimos creando relatos para mantenernos vivos, y participamos en grupo o solos, con ruido o en silencio, capiroteamos o pasamos largas jornadas limpiando plata, y nos cruzamos constantemente sin conocernos pero formando parte irremediable del ecosistema, y claro, acabamos yendo a terapia en algún bar como tertulianos.
En la serie para contactar con "el tipo" sólo necesitaban conocer su teléfono y aportar referencias. Nosotros en nuestra realidad poliédrica tenemos que preguntarnos para invocarla, te necesito, ¿puedes venir ya?