La Viña

Quedan 31 días. 

La calle hasta el final. Ya dije que empezaba amplia y ajardinada para ir perdiendo anchura a la vez que también lo hacen en altura los edificios. Todo para ir pasando de donde había huertas y una fábrica de pieles hasta la zona central de este ramillete de calles ya olvidadas como unidad por pura absorción. A espaldas de la poco exitosa Plaza de Toros Monumental y teniendo como límite la calle Oriente surgió este barrio popular donde sus vecinos eran protagonistas del día  a día, con sus talleres, casas humildes y chozas. Si tiene la suerte de encontrarse con alguno que viviera el crecer y el transformarse de esta parte de la ciudad no pierda la ocasión de preguntar y escuchar, déjeles hablar y que le cuenten también de donde vinieron y coménteles si estuvieron en diciembre de 1994 cuando la Virgen de la Encarnación, ya Coronada, recorrió sus calles como guinda final de aquella noche de locura entre sus hermanos. Igual estuvieron en la esquina de Maese Farfán esperando su llegada o en esta misma donde estamos, en su parte más recogida. Muchos no olvidarán, las horas que eran, había que gustarse a pesar del frío. No ocurrió lo mismo veinticinco años despúes que regresó directamente a la parroquia tras el fin de semana en la Catedral. El último palio, sí, a fecha de hoy que haya salido. Y seguimos esperando.
Para muchos fue uno más pero no lo fue. Nunca lo fue. Ahora, nos chocamos con nuestra propia impotencia ¿por qué no pisaste de nuevo el barrio cuna de lo que fue La Calzada ganándole unas horas de luz a la noche que se avecinaba?

No hay comentarios: